Algunas personas prefieren el arroz suelto, otras el arroz pegajoso, y a mí personalmente me gusta mucho el arroz mexicano. Si has comido en un restaurante mexicano de verdad, habrás probado el famoso arroz rosa mexicano. Ese tipo de arroz es uno de mis favoritos. Parece que pudiera saborearlo solo. El arroz mexicano combina muy bien con todo tipo de platos mexicanos, filetes, guisos y demás.
Como sabéis, no sería yo si no intentara hacer mi propio arroz en mi cocina. No es difícil de hacer, pero necesitarás paciencia y no mezclar el arroz en el momento equivocado. Hay que dar tiempo al arroz para que absorba el caldo y la salsa de tomate casera. Por lo tanto, al cocinar el arroz de esta manera, hay que seguir la receta paso a paso y vigilar el tiempo de cocción para que el arroz no se pegue (si se remueve demasiado pronto o demasiado). Pero si a mí me ha funcionado, te garantizo que a ti también. ¡Vamos a ponernos a cocinar! 😉